Finalizadas las fiestas parece que nos invade la sensación de poner en marcha nuevos hábitos para el nuevo año. Ya sabéis, como decía en el post anterior, arrancamos enero cargaditos de buenos propósitos.
Pero no nos machaquemos, hagamos nuestra lista de planes desde el cariño a nosotros mismos, vamos a dejar a un lado las exigencias inflexibles y las altas expectativas. Pensemos en clave de «pasito a pasito».
Me ha encantado el post de Shamash Alidina con «Pistas para propósitos de Año Nuevo en clave mindful y compasivo» Tips for Mindful (and Kindful) New Year Resolutions)
No se trata de ser exigentes y rígidos con nosotros mismos. Parece que debemos ser inflexibles e implacables, y lanzarnos a la conquista de nuestros planes de año nuevo como si en ello nos fuera la vida. Uffff, qué agotamiento, no??
Mejor partir de una premisa clara, y aquí va nuestra primera pista: ¡Somos estupendos tal y como somos!. No necesitamos cumplir grandes retos para ser mejores. Nuestras imperfecciones también nos hacen perfectos. Y no conseguir el 100% de lo que nos proponemos no nos hace peores personas. Importante. No es cuestión de automachacarnos.
Segunda pista: Que nuestros nuevos retos nos permitan disfrutar. Que comencemos a hacer cosas que nos llenen de energía positiva y planten una gran sonrisa en nuestra cara. Llenemos el 2017 de planes divertidos, que nos hagan sentir felices.
Atención despistadillos, tercera pista: Seamos capaces de querernos y mimarnos a nosotros mismos. No pasa NADA por tratarnos a nosotros mismos con cariño, con compasión, con la ternura que trataríamos a un niño pequeño…a veces nos olvidamos de darnos unos «auto-achuchones». Y nos hace tanto bien…
Cuarta pista: Bajemos un poco el listón de nuestras expectativas. Conseguiremos pequeños éxitos, pero apartaremos a un lado las sombras de eso que nos empeñamos en llamar «fracasos». Hagamos el propósito de no ser tan rígidos con nosotros mismos.
Por último, quinta pista: de menos a más. ¿Por qué no ponernos pequeños retos para el día siguiente que sean muy fáciles de cumplir?. Y desde nuestros pequeños logros seguiremos avanzando hacia nuestros siguientes pequeños retos. Podemos ir avanzando poco a poco, y una vez que consigamos un mini-logro, además de alegrarnos y felicitarnos por ello, podemos intentar el siguiente paso.
El 2017 nos regala la posibilidad de poner en marcha nuevos hábitos, retos e ilusiones. Hagámoslo desde la amabilidad con nosotros mismos. Funciona.